Silvana Asnal, la jueza de Río Tercero, dictaminó que el niño debe quedar bajo el cuidado de su padre, para lograr la revinculación.
El abogado Agustín Rivero, comentó en una radio de la localidad que van a recurrir la decisión.
A pesar de las denuncias y antecedentes, la magistrada consideró que no había argumentos para suspender el contacto padre-hijo y se trabajó en la revinculación supervisada.
Según contó el abogado en el programa radial, en 7 de los 10 encuentros pautados por la justicia, el niño rompió en llanto a los 10 minutos de iniciar el contacto.
La Licenciada encargada de la revinculación consideró que los encuentros fallaron porque no hubo predisposición de parte de la madre. La mujer llevó al niño a cada uno de los encuentros, mientras que el padre faltó a 2 de ellos.
“Siento como si me hubieran secuestrado a mi hijo”, comentó Juliana Ochipinti, la madre del niño
Según explicó a este diario la citaron a una audiencia en la cual sorpresivamente le informaron que el niño sería entregado a su padre.
El padre habría pedido la tenencia para lograr la revinculación con el niño, ya que emocionalmente no puede soportar la revinculación supervisada.
El tribunal presente en la audiencia resolvió hacer una entrega no pública del niño, y la madre, quien se descompuso al enterarse de la noticia, no pudo despedirse del niño.
Caso recurrente en Río Tercero
Es la segunda vez en una semana que la justicia toma la decisión de dar la tenencia a padres que tienen denuncias por maltrato. La observación de los ciudadanos, sin embargo, se centra en la forma en que los menores fueron apartados de sus madres.
En ese sentido, la preocupación se centró en los traumas emocionales que estos hechos podrían generar en los niños
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