Coherente con las promesas de la libertad del mercado, en la última semana la Secretaría de Educación del Gobierno de la Nación anunció en el boletín oficial la pausa para la creación de 5 universidades. Entre ellas, la de Río Tercero.
Las universidades que habían obtenido la ley para su creación a finales del 2023, quedarán en la ilusión de un pueblo. Como ya es de público conocimiento, la Universidad Nacional de Río Tercero estaba comprendida en este grupo de nuevas universidades.
El descontento fue general y las redes sociales se llenaron de expresiones de rechazo durante la semana. Las autoridades municipales y nacionales que representan al pueblo riotercerense también declararon su disconformidad.
Aunque también hubo usuarios en redes sociales que expresaron conformidad y apoyo en este retroceso, argumentando que hay una universidad cerca y considerando que la educación es un gasto.
En este contexto se hace imprescindible recordar que en el caso de Río Tercero, la creación de una universidad era el resultado de una lucha de muchos años, que sigue buscando la reparación histórica por el atentado a Fábrica Militar ocurrido en 1995.
Los daños que aquel gobierno causó tiñendo de sangre la historia local, parecen nunca saldarse.
El rector de la universidad de Río Tercero, removido
A través del nuevo decreto que detiene la creación de estas universidades, el Rector Organizador queda removido de su cargo. Pablo Yannibelli habló en un medio televisivo y consideró que la importancia de una Universidad no es solamente una inversión educativa, sino que genera un ”impacto económico en el desarrollo de las comunidades”
Tanto Yannibelli como el Intendente Marcos Ferrer dejaron expresado que en dos meses de planificación de la UNRT se firmaron 56 convenios con empresas. Muestra de que la comunidad es consciente de la necesidad de una universidad en la zona.
Desde la prensa oficial de la UNRT enviaron un documento a la prensa donde detallan En el documento detalla todas las cosas que se hicieron hasta ahora, aun sin haber recibido el presupuesto que por ley debería haber recibido.
En este sentido, el Intendente habló a los riotercerenses desde sus redes sociales, no solamente mostrando su disconformidad, sino manifestando que seguirá insistiendo en que se revea la decisión.
Marcos Ferrer argumentó a favor de la universidad diciendo que “al estado no le costó hasta ahora ni un centavo” la Universidad ya que el cargo del rector es ad honorem, una declaración un tanto peligrosa cuando se intenta defender la garantía de la educación pública.
La solidez de la Diputada Gabriela Brower de Koning
Por su lado, la diputada Brower publicó en sus redes sociales una serie de argumentos para defender la creación de la universidad.
“La Universidad Nacional de Río Tercero fue creada por la Ley 27.730 que cumplió con todos los requisitos establecidos por la Ley de Educación Superior para la creación de una nueva institución: Informe de factibilidad, previsión presupuestaria e informe del Consejo Interuniversitario Nacional. La verificación del proceso de creación corresponde exclusivamente al Congreso de la Nación y en excepcionalísimos casos, de acuerdo al criterio de la Corte Suprema de Justicia, le corresponde al Poder Judicial por cuestiones formales. Nada de eso se corresponde con los argumentos vertidos por la resolución del Ministerio.”
Además en una de sus publicaciones consideró que este decreto no es una sorpresa, ya que”se identifica con una visión cargada de preconceptos sobre el rol del estado.”
En el mismo posteo insistió en la importancia de “mejorar la calidad educación pública y su alcance a los sectores más vulnerables.” Y consideró que “eso no se resuelve vaciando ni desfinanciando”.
Mientras se espera una audiencia con la Ministra de Capital Humano Sandra Portovello, la Universidad parece haber sido un castillo de arena, alcanzado por la ola del mar cuando apenas se estaba empezando a construir.
La reparación histórica y la palabra justicia seguirán siendo la agenda de lucha para los riotercerenses.
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